El presupuesto manda. A todos nos gustaría comer verdaderos manjares a diario, pero lo cierto es que el precio de los productos, y lo cara que está la vida, no da mucho margen. Una de las opciones más recomendables si contamos con poco presupuesto y ahorrar es la de organizar tu menú semanal más económico. Esto te permitirá tener una visión exacta de lo que gastas semanalmente, sin caprichos, sólo con lo básico y necesario para pasar de lunes a domingo. Te ayudamos a organizar y planificar el menú cada semana si tienes poco presupuesto con algunos consejos que te vendrán muy pero que muy bien.

Cómo planificar el menú semanal más económico

¿Sabías que con una planificación previa podrás organizar tu menú semanal de forma rápida y económica? Presta atención a estos trucos para planificar el menú semanal con poco presupuesto:

Organiza el menú semanal con el estómago lleno

Cuando organices el menú semanal, intenta hacerlo con el estómago lleno. Esto siempre te dará una visión más objetiva y pensarás en platos más saludables (también más económicos). Si lo haces con hambre, es probable que tengas en la cabeza un montón de recetas que además de no ser del todo sanas, cuesten más dinero.

Revisa la nevera, el congelador y las alacenas

Hay veces que dejamos alimentos olvidados a la hora de organizar el menú semanal. Esto es una práctica frecuente que puede sucedernos a todos. Así, a la hora de organizar el menú semanal, lo mejor es revisar la nevera, el congelador y las alacenas. Una visita rápida te permitirá saber qué es lo que tienes y qué cosas necesitas para poder hacer platos para esta semana. Además, es posible que tengas productos que estén a punto de caducar, incluso platos congelados que podrías usar para esta semana.

Aprovecha todas las recetas

Evita platos que sólo sean carne o pescado, tanto si debes cocinar para ti solo como si debes hacerlo para más personas. Opta siempre por platos que combinen otros ingredientes como hortalizas. De esta manera, tendrás, además de platos más sanos, platos más contundentes. La carne y el pescado suele ser más caro, por lo que, si complementas con verduras y legumbres, tus platos estarán más llenos y gastarás menos.

No tires absolutamente nada

Las abuelas ya practicaban eso de la cocina de aprovechamiento. ¿Por qué no hacerlo nosotros? Es mejor hacer raciones extra para poder congelar o guardar y aprovechar las sobras de comida siempre. De esta forma, siempre tendrás en tu congelador o nevera un plato extra para la semana. Además, las sobras de determinados platos pueden ayudarte a preparar otros. Croquetas con el resto del cocido, por ejemplo, o un puré de verduras que han sobrado del potaje. Además, la carne de todos estos pucheros puedes aprovecharlas para tostas, ensaladas o bocadillos.

Compra siempre con cabeza

Organizar el menú semanal pasa también por ir a comprar, y esto hay que hacerlo siempre con cabeza y de forma ordenada. Una vez tengas claro qué quieres cocinar todos los días, prepara una lista completa de los ingredientes que necesitas, quitando aquellos con los que cuentes ya en tu cocina.

Si llevas una lista de la compra, te aseguras de que los que compras es lo imprescindible, evitando así caer en caprichos innecesarios.  Además, también es importantísimo ir sin hambre. Está comprobado que, si uno va al supermercado con hambre, termina comprando más cosas de las que tenía pensadas en un inicio.

Intenta hacer la compra semanal. Ir varias veces a un supermercado por semana puede ser contraproducente. Más tentaciones y más posibilidades de comprar cosas que no necesitas. Mantente también al tanto de las ofertas y descuentos de última hora para hacerte con los mejores precios.