Es seguro reutilizar una botella de plástico

3 razones por las que no deberías rellenar una botella de plástico



Las botellas de plástico son el envase más utilizado en todo el mundo para transportar el agua que bebemos a lo largo del día. Sin embargo, la rutina de rellenar una y otra vez la misma botella de plástico puede tener consecuencias para la salud, y muchos de nosotros no somos conscientes de ello. Sigue leyendo y averigua los motivos por los que reutilizar una botella de plástico no es tan saludable como parece a simple vista.

 ¿Por qué no se deben rellenar las botellas de plástico?

Aunque son el envase más utilizado para transportar el agua con seguridad a todas partes, las botellas de plástico contienen un material que puede tener consecuencias directas sobre la salud. Se trata del bisfenol A, un material que se añade durante el proceso de fabricación de las botellas para conseguir un plástico más duro y de aspecto transparente. La mayor parte de las botellas de plástico que utilizamos hoy en día están fabricadas a partir de tereftalato de polietileno (PET), un material que es muy resistente a los agentes químicos, estable a la intemperie y muy rígido. Sin embargo, el problema de las botellas de plástico no radica cuando cogemos la costumbre de rellenar una y otra vez el mismo envase y las volvemos a utilizar. Te contamos las razones por las que  no se deben rellenar las botellas de plástico:

1. Por la fuga de sustancias químicas

Cada vez que rellenamos una botella de plástico con contenido nuevo, estamos provocando que el bisfenol A que contiene la botella migre a la bebida que añadimos dentro de la misma. De hecho, se ha demostrado que si el plástico se somete a temperaturas elevadas o a la exposición directa de la luz solar, se multiplica la liberación de este aditivo. Según apuntan algunas investigaciones científicas, el bisfenol A puede interferir sobre el sistema endocrino y las hormonas sexuales, por lo que las botellas de plástico que contienen BPA no deberían reutilizarse nunca por las consecuencias directas que esto tiene sobre la salud.

2. Por la aparición de bacterias

Además de la migración de sustancias químicas, cada vez que reutilizamos una botella de plástico estamos propiciando la aparición de bacterias. De hecho, según confirmó un experimento realizado en Reino Unido con botellas reutilizadas, la cifra de bacterias de estas botellas de plástico alcanzó las 900.000 unidades por centímetro cuadrado, y el 60% de los gérmenes que se encontraron eran capaces de enfermar a cualquier persona. Como se trata de envases que resultan difíciles de limpiar, las botellas de plástico son el lugar idóneo para el crecimiento de bacterias. Además, en el plástico de las botellas los microorganismos se adhieren  con más facilidad que en otros materiales como el vidrio, sobre todo si la botella tiene recovecos o deformaciones. Lo mejor es reciclarlas en la basura doméstica como haríamos con cualquier otro recipiente.

3. Por que se pueden romper y agrietar

Por lo general, los envases de plástico son bastante frágiles, y no están pensadas para darles un uso continuado en el tiempo, sino para utilizarlos una sola vez y tirarlos al correspondiente cubo de reciclaje. De hecho, cada vez que rellenamos una botella de plástico con agua u otro líquido, corremos el riesgo de que se rompa o se agriete. Esto es debido al desgaste diario que sufre la propia botella cada vez que la rellenamos.  Por ello, siempre que se utilicen botellas de agua es conveniente no someterlas a temperaturas excesivas, ya que la migración de químicos y la proliferación de bacterias es mayor cuando estos envases se encuentran a una temperatura elevada o con la presencia directa de la luz. En este sentido, los expertos recomiendan utilizar las botellas de Polipropileno (de plástico blanco) ya que estos envases no son reactivos como las botellas de plástico convencional.

  • ¿Te ha servido de ayuda?
  • No

Compartir este artículo