¿Quieres conseguir un hogar con más luz y espacio? Entonces, una muy buena idea que tienes a tu disposición es la de integrar la cocina y el salón. Es decir, unir ambos espacios en uno para, así, tirar tabiques y conseguir que la zona del día a día se vea con mayor amplitud e iluminación. En este artículo vamos a comprobar cómo integrar la cocina y el salón a través de sencillos trucos. Así podrás conseguir una decoración excepcional y una casa mucho más amplia y confortable para vivir.
Cómo integrar la cocina y el salón
Si tienes la cocina cerrada y separada del salón, para poder integrar ambos espacios necesitarás una reforma. Con una reforma lo que se persigue es eliminar la pared que separa los dos habitáculos, así como crear un espacio más homogéneo y diáfano. Durante esta obra se pueden tirar los tabiques y muros que se necesiten pero, también, se puede aprovechar para cambiar algunos elementos y conseguir una mejor distribución. Por ejemplo, se pueden elevar los techos, cambiar radiados, reordenar la colocación de los electrodomésticos, etcétera. También se pueden recolocar las instalaciones de fontanería si se quieren cambiar de lugar espacios como el fregadero o el lavavajillas.
Un aspecto básico y esencial que tienes que tener en cuenta para integrar la cocina y el salón es que la campana (o extractor) se convierte en un elemento clave. Y es que te ayudará a limpiar el ambiente, absorber el humo y evitar que el olor a comida se expanda por toda la casa.
Las mejores ideas para integrar la cocina y el salón
Pero vamos a darte algunas de las mejores ideas para que sepas cómo integrar la cocina y el salón. Son trucos con los que podrás unificar ambos ambientes y crear un espacio diáfano y estéticamente muy bien organizado.
La misma combinación de colores
Si quieres crear un espacio que integre la cocina y el salón totalmente, nada mejor como unificar los colores y materiales para conseguir que la cocina y el salón se vean que forman parte de la misma habitación. Por ejemplo, puedes optar por usar madera y blanco, una combinación sencilla y acogedora que le dará uniformidad a toda la estancia. Con esto, las dos estancias que antes estaban separadas, ahora parecerán una.
El mismo suelo
También es importante optar por tener el mismo suelo en la cocina y el salón. ¿Y qué pasa si tenemos parquet en el comedor? Absolutamente nada: puedes colocar también parquet en la cocina aunque, eso sí, puedes optar por uno que sea sintético y flotante. De esta forma, no se estropeará tan fácilmente con los "accidentes" típicos que tienen lugar en la cocina.
Separa los espacios con una barra multiusos
Aunque queramos integrar la cocina y el salón, lo cierto es que no está de más separar los dos espacios visualmente. De esta forma, delimitamos cuál es la zona para comer y cuál la pensada para el descanso. La mejor manera de conseguir esta separación es colocando una barra multiusos, como una especie de isla, que separe ambas zonas y que, además, te servirá de espacio para tomar un café o desayunar rápido.
Alinea la cocina con el salón
Si quieres que esta nueva estancia de tu casa se vea amplia y perfectamente alineada, es importante que el salón y la cocina estén alineados. Es decir, puedes aprovechar la misma pared en la que tienes el sofá para colocar, más adelante, la zona de la cocina y los electrodomésticos. Así, quedará una pared recargada y toda la demás sala libre y más ligera.
Instalar una puerta corredera
Y, por último, otro consejo para integrar la cocina y el salón es que, si puedes, instales una puerta corredera. Esta es una opción perfecta para evitar los olores de la comida y separar las estancias cuando estemos cocinando. Durante el resto del día, la puerta puede estar completamente abierta para que la zona se vea más amplia pero cerrada para evitar la acumulación de olores o grasas.