Es muy habitual que, dentro de nuestros hogares, contemos con alargadores eléctricos. Son aparatos que están pensados para que podamos conectar diferentes objetos eléctricos que estén colocados lejos del enchufe. Son unos aparatos muy comunes pero que tienen que usarse de forma concienzuda para evita cualquier accidente o peligro dentro de nuestro hogar.
Por este motivo, vamos a descubrirte las claves para usar un alargador eléctrico de forma segura y, así, evitar cualquier situación que pueda acarrear peligro alguno.
Cómo usar un alargador eléctrico con seguridad
Aunque tengamos la casa llena de alargadores eléctricos, no debemos olvidarnos de que son conductores de corriente eléctrica y, por tanto, deberemos extremar las precauciones para conseguir que su uso sea el adecuado. De lo contrario, estos aparatos pueden producir cortocircuitos, pasarnos la corriente o provocar pequeños incendios.
Para que sepas usar un alargador eléctrico de forma segura, a continuación vamos a darte las claves para que aprendas a emplearlo con seguridad:
1. Comprueba la capacidad del alargador
La mayoría de estos alargadores eléctricos cuentan con diferentes tomas de corriente (de 3 a 6 en su gran mayoría). Pero que tenga todas estas tomas no significa que está preparado para dar electricidad a todos los aparatos a la vez.
Para ello,es importante que tengas en cuenta la capacidad conductora del alargador. Es decir, tenemos que calcular la potencia de todos los aparatos que conectamos y, la suma resultante, tendrá que ser inferior a la capacidad del alargador. Esta potencia la encontrarás en la carcasa del aparato.
2. Alargador demasiado caliente
Para usar un alargador eléctrico de forma segura es importante que detectes que su temperatura sea la normal. Si te das cuenta de que está demasiado caliente, es importante que lo apagues. Para ello, desenchufa su conexión directa con el enchufe para que no se sobrecaliente.
En el caso de que esto ocurra, te darás cuenta de que el aparato ha dejado de funcionar y, por tanto, puede ser que se haya estropeado por el exceso de uso. Lo más recomendable es que, en cuanto detectes que su temperatura es elevada, desenchufes los aparatos y el alargador del enchufe y dejes que se enfríe durante 24 horas antes de volverlo a usar. También deberás proteger tus aparatos eléctricos en caso de tormenta y no sobrecargar el alargador.
3. Protege a los niños
También es importante que coloquemos los alargadores en zonas de difícil acceso para los más peques de la casa. Ten en cuenta que si los niños lo tocan de forma directa, es probable que sientan una ligera descarga que puede perjudicarles. Por eso, puedes optar por colocarlos en zonas inaccesibles o, también, contar con unas pestañas que están especialmente pensadas para evitar que los peques se puedan electrocutar.
4. Longitud máxima de 1 metro y medio
Para conseguir proteger la seguridad en tu casa es recomendable que tengas alargadores eléctricos que sean, como máximo, de 1 metro y medio de largada. De esta forma, evitarás tropezones o accidentes derivados de los cables repartidos por las habitaciones.
5. Bases múltiples antes que el ladrón en el enchufe
Los alargadores de corriente pueden ser aquellos que cuentan con diferentes tomas de contacto en una base o, también, aquellos que se conectan directamente al enchufe y que te permiten enchufar dos o más aparatos. Tienes que saber que los más seguros son los que cuentan con una base ya que, los otros, tienen más riesgos de provocar cortocircuitos.
Consejos para usar un alargador eléctrico de forma segura
Ahora que ya sabes algunos trucos para usar estos alargadores y no tener un riesgo alto de accidentes, es importante que también tengas en cuenta lo siguiente:
- Aleja los alargadores de las telas inflamables (cortinas, visillos, etc.)
- Nunca los toques con las manos, los pies o el pelo húmedos
- Desconecta el alargador cuando dejes de usarlo
- Desenchúfalo de la corriente los días de lluvia y tormenta
- No los cubras con ninguna tela o cubierta porque podría provocar un incendio
